jueves, 17 de septiembre de 2009

CUANDO SE CREE QUE ES BUENA


Vamos a imaginar que tienen un hijo, hermano, amigo, primo, que de pronto tiene una relación con una mujer que ama demasiado... (Denle nombre de alguien que conozcan y por el que tengan afecto)

Él viene a verlas y les cuenta: hay, es que ella está embarazada, (o quiere que vivamos juntos, o me va a ayudar etc.) yo quiero irme pero ella me dice que luchara por mi amor, que me esperara, (aquí se puede poner lo que nos gusta decirle a los hombres) que va a poner todo de su parte para que estemos juntos, que tenga paciencia...y es que me ha aguantado tantas!!!

Entonces vemos que lo que el pobre tipo quiere es alejarse de la "fastidiosa Elvira" (ese personaje de los tiny toons que ahoga con su amor a sus mascotas) pero como ella lo quiere tanto empieza a desarrollar una mezcla de cariño pero también de profundo odio y resentimiento por ella.

La engaña, le miente, no le da dinero, le dice que es una tonta, una gorda...pero ella sigue firme...ella lo resiste todo, insultos, desprecios, palabras duras, falta de dinero...porque ..Es tan buena!

Cuando él le dice que se quiere ir, que lo mejor será terminar, ve como la boca de ella comienza a hacer pucheros, como sus ojos se llenan de angustia, como si escuchara una sentencia de muerte, y escucha como lo acusa de ser un insensible....entonces vienen los ruegos las promesas, ella se esmera en psicoanalizar la situación, en buscar ayuda, en leer libros sobre cómo mejorar la vida en pareja, en hacer amarres, etc. y le repite: que nos paso mi amor? Porque no eres feliz si yo te lo doy todo! Todo y el baile sigue...

Un buen día el decide que sacara provecho de la situación, y ya que se siente obligado a estar con ella hará todo lo posible por destruirla, con malos comentarios, maltratos etc...Y si está lo suficientemente enfermo, ya no la querrá soltar... Pero...

Si él tiene suerte, se encontrara a alguna mujer que si se respete y que le diga que para que ella le diga que si, tendrá que portarse como hombre...y lo hará, claro que lo hará!....abandonara a la llorosa, triste lastimera mujer que lo ama, y se irá tras la que si se respeta....

Si no tiene suerte pasara el resto de su mediocre vida viviendo con la mujer angustiante, trabajadora, buena, buenísima, controladora, que todo lo resuelve, hostil, dócil, que lo adora, casi sin sexo, porque ella está cansada, o quiere palabras tiernas antes, odiándola cada día en lo más profundo de su corazón y sin entender que carajos le paso para llevar una vida tan triste.

Y que pasara con ella? Después de vivir como mártir 20 años desarrollara alguna enfermedad crónico degenerativa, perderá su atractivo, se hará más rancia, más triste, más confusa, no entenderá porque el odia llevarla a urgencias al hospital, porque a veces le dice. Porque no te mueres? Porque le exige camisas limpias cuando ella apenas puede tenerse en pie....

Así, si él se va, ella tiene una oportunidad de cambiar, de volver en sí, de estar libre de su obsesión....o de buscarse otro papanatas si no acepta estar sola.

Si él se va, él tiene también una oportunidad de cambiar, de ser mejor...o ya engolfado, encontrara otra tonta que haga el mismo show de te amo te amo.

Y si los dos se quedan juntos....ambos perderán....y si tuvieron hijos, ellos desarrollaran ya sea la codependencia o la violencia...

Carajo....

Así oyendo a su hijo, amigo, hermano, vecino etc...Contarles sobre esta mujer que lo quiere tanto seguramente aventaran la servilleta y le dirán viéndolo a los ojos. Por Dios,(nombre de él) porque no dejas de una vez a esa %%@** vieja? Esta loca, déjala, déjala....

...y luego se dirán a sí mismas...ups...jeje, si yo me porto igual que ella....


Suscribete a mujeres que aman demasiado por Email

domingo, 23 de agosto de 2009

MQAD y baja autoestima

En el libro "Relaciones Destructivas" de Jill Murray se menciona que el "padre de la autoestima" Nathaniel Branden, afirma que, aparte de los problemas de origen biológico, no se le ocurre ni un solo trastorno psicológico que no esté relacionado con una baja autoestima: depresiòn, ansiedad, miedo al exito o a tener relaciones íntimas, consumo de alcohol o drogas, bajo rendimiento escolar o laboral, abuso marital, inmadurez emocional, suicidio y crímenes de violencia y ella misma cuestiona si esto no es asombroso.

Esta es una lista de sentimientos que se incluye en el libro citado anteriormente donde podrás checar como esta tu autoestima:




  1. Intento complacer a los demás en vez de a mí misma.


  2. No sé lo que necesito en relidad o, si lo sé, me digo a mí misma que no es importante.


  3. Me resulta más fácil sentir y expresar rabia por las injusticias que sufren los demás que por las que sufro yo misma.


  4. Me anticipo a las necesidades de los demás.


  5. Me siento bien dando e incómoda o culpable recibiendo.


  6. Me siento atraída hacia las personas necesitadas.


  7. Me comprometo en exceso.


  8. Me echo la culpa de todo.


  9. Me critico a mí misma por mi forma de pensar y sentir; mi aspecto y mi comportamiento.


  10. Rechazo los cumplidos o las alabanzas.


  11. Me siento diferente a la mayoría de las personas.


  12. Pienso que no soy lo suficientemente buena.


  13. Temo al rechazo.


  14. Siempre me tomo las cosas como algo personal.


  15. Me siento como si fuera una víctima.


  16. Me digo a mí misma que no soy capaz de hacer nada bien.


  17. Tengo miedo de cometer errores


  18. Siento mucha culpa.


  19. En mi vida existen muchos <>


  20. Creo que es imposible que a otras personas les guste o que me quieran.


  21. Los problemas insignificantes o el comportamiento de otras personas me quitan el sueño.


  22. Me asusta permitir que otras personas vean quién soy.


  23. Siento que las personas o los acontecimientos me controlan.


  24. Intento decir lo que creo que complacerá a los demás.


  25. En mi vocabulario no existe la palabra <>.


  26. Evito hablar sobre mí misma.


  27. Creo que la mayor parte de lo que digo carece de importancia o no es importante.


  28. Me disculpo constantemente.


  29. Dejo que otras personas me hagan daño.


  30. No confío en mi misma, mis sentimientos o mis decisiones, ni tampoco en otras personas.


  31. Confío excesivamente en otras personas antes de conocerlas en verdad.


  32. Me asusta mi propia ira.


  33. Temo hacer enfadar a los demás.


  34. Me miento a mí misma.


  35. No recuerdo la última vez que me sentí feliz, contenta o en paz conmigo misma.


  36. Busco la felicidad en el exterior.


  37. Busco amor y aprobación desesperadamente.


  38. Estar sola me asusta o me hace sentir incómoda.


  39. Me sorprendo a mí misma buscando amor en personas que son incapaces de amar.


  40. Intento demostrar que soy lo suficientemente buena como para que los demás me quieran.


  41. Me adentro en relaciones serias con demasiada rapidez.


  42. Sigo adelante con relaciones que no funcionan.


  43. No digo lo que quiero decir.


  44. Me encuentro más segura sientiéndome dolida que enfadándome.


  45. Mantengo relaciones sexuales cuando no quiero hacerlo.


  46. Me resulta difícil divertirme y ser espontánea.


  47. Sigo siendo leal a las personas que me han hecho daño.


  48. Invento múltiples excusas para justificar el comportamiento de otras personas.


  49. A menudo me siento perdida por lo que respecta al futuro.


Expectativas del amor

“Lo que yo quería era que estuviéramos bien, que estuviéramos de buenas… como antes, quería que todas las palabras, los gritos, los insultos y la frialdad de la distancia en la cercanía se terminara, y mi miedo e inseguridad se alimentaron de su descalificación y su miedo”

Anónimo

Últimamente veo con -demasiada- frecuencia como muchos de los malentendidos y las desavenencias entre la gente, tienen un mismo origen: las expectativas que nos creamos respecto a los demás. Yo misma doy fe de haberlo sufrido en mi propia carne. Puede resultar sorprendente -impresionante diría-, lo que se llega a hacer con tal de que alguien responda exactamente a lo que se espera de él/ella. Si a eso añadimos el orgullo, el resultado puede ser aterrador.

Creo que ese "enganche" forma parte de las relaciones de internet, o sea queremos que la persona "dueña de nuestras quincenas" que no hemos ni conocido responda a nuestras expectativas y si no sucede así por supuesto que sufrimos!!!

Cuando conocemos a una persona es inevitable que nos acerquemos desde nuestras creencias y expectativas personales y con ese listado imaginario, a veces consciente y otras inconscientes de los deberías y tendrías que… mismos que nos fueron enseñados por nuestra familia, a veces de manera verbal y otras muchas de manera no verbal, el caso es que nos mostramos ante el otro o la otra con ese listado, esperando que suceda y esperamos y después desesperamos y después nada, al final nada.

Hasta aquí no suena tan complicado, pues todas las personas podemos tener ilusiones, fantasías o deseos de cómo queremos que sean las cosas en un futuro, algunas veces idealizamos formar una familia, tener hijos, comprar una casa, viajar, etc. Y es aquí donde las cosas dejan de ser tan fáciles, pues la otra persona, aquella que al verla hemos deseado y decidido que sea nuestra pareja, también viene con el mismo, pero diferente listado de deseos, expectativas y sus debería y tendría que ser de tal o cual manera, que igual que nosotros lo aprendió, que igual que nosotros su familia y su contexto le enseño.

Y nos encontramos y comenzamos a salir y por fin llega ese día en que se decide formar una pareja con aquella persona, todo es sencillo al inicio pues estamos en la primera fase del enamoramiento o en amor miento como yo le llamo. Y construimos, amamos, entregamos, erotizamos, planeamos, hacemos, permitimos, hablamos, sugerimos, negociamos, toleramos y respetamos. Sin embargo al paso de los días es muy posible o casi imposible que nuestro listado de creencias y expectativas comiencen a surgir y comenzamos ahora a discutir por que “la pasta de dientes no está cerrada”, “porque el cepillo no está en su lugar”, “porque dedicas mucho tiempo a no hacer o no hacer tal cosa”, “porque ya no, porque no así, porque yo, porque si” y la lista continua de manera ilógica e inexplicable, trasgrediendo la individualidad del otro, tratando de manera atropellada de entender al otro o de ser comprendido por el otro.

Continua la relación y al mismo tiempo continúan los velos de la comunicación, colocándose uno tras de otro para al final creer que se entiende y creer que se expresa de manera adecuada y no pasa y nos damos cuenta por la conducta del otro que no somos reales frente a frente, sino parte de un ser construido desde el dolor, el rencor, la desesperanza y el desanimo o el deseo de que existas como yo te imagine.


Y es en nombre del amor que comenzamos a querer controlar y controlamos, y en nombre del amor exijo que me respetes y te grito, es en nombre del amor que hacemos y dejamos de hacer tantas cosas, hasta llegar al punto de querer que la otra persona sea aquello que no pude ser yo y descalifico las habilidades por mi miedo a mi fracaso, es cuando la teoría de la media naranja tiene sentido, donde creer no vale de nada sino considero que ambos, somos naranjas, nunca medias naranjas y como reza la oración de la Gestalt, yo soy yo y tu eres tú, no estoy yo en este mundo para cumplir tus expectativas y no estás tú en este mundo para cumplir las mías.

Ya, para este momento solo queda, desear de corazón que la pareja sea en realidad este par de naranjas que caminan acompañándose, respetándose, no descalificando, reconociendo que cada quién puede tener un sabor distinto y ser igual naranjas, reconocer con la humildad del verdadero amor las habilidades del otro y engrandecerlas, para desde ahí fortalecer nuestra relación desde la fortaleza. No facturas atrasadas, creer en la palabra del otro, y sobre todo y a pesar de todo saber reconocer que es sólo parado en ambos pies que cada quién podrá acompañar, nunca esperar que sea la otra persona la que deba de, reconocer mis conductas de inmadurez para hacer que crezcan, reconocer mis conductas fuertes para hacerlas dóciles y fácil de entender.


Finalmente, reconocer que no es fácil estar cerca de alguien que creció con su listado de expectativas y que muchas de ellas no son iguales a las tuyas, pero lo que es fácil es que en nombre del amor se actualicen los listados y saber que si el universo conspiro para que estuvieran juntos un día, es por todo lo que ambos deben aprender del otro, cada quien haciendo lo suyo acompañando a veces, en silencio, en la distancia, en la cercanía, en la palabra, en el abrazo, en el sexo, pero eso sí acompañando en el nombre del amor… y así vale la pena solo por hoy volver a confiar.


Estas reflexiones continuarán y se enriquecerán con tus comentarios !suscribete es gratis¡http://relaciones-por-internet.blogspot.com/

Suscribete a mujeres que aman demasiado por Email

martes, 11 de agosto de 2009

¿Estás enganchada en una relación?

Esta pregunta la hago como parte importante de mi blog, ya que, creo que es importante entender que generalmente somos nosotras las que nos enganchamos en la relación sin querer ver que somos nosotras mismas las que nos podemos "soltar".



Así he encontrado pacientes que sufren todo tipo de agresiones: física, verbal, económica, sexual, abandono, omisión y siguen ancladas, otras que no sufren agresiones pero se pasan la vida esperando que un novio-amante inaccesible algún día les haga caso y hacen de todo por complacerlo (estos novios-amantes pueden ser solteros, divorciados, viudos o casados pero no quieren una relación "formal")



Como todas sabemos los seres humanos somos individuales y cada uno tenemos nuestras propias facetas lo que hace que lo que para algunas personas es locura para otras sea normal. Pero algo que nos acerca a las mujeres es como nos educaron: nos educaron para servir, cuidar y proteger. Y también nos contaron la historia del principe azul que nos iba a rescatar, cuidar, mantener y proteger, así buscamos hombres seguros y valientes.



Pero ¿que pasa que ese hombre seguro y valiente resulta que tiene una adicción? Pues entonces las cuidadoras oficiales tomamos nuestro papel muy en serio y al mínimo movimiento donde mi hombre se pueda hacer daño estoy yo para cuidarlo. ¿Si es inaccesible? Pues más me apego para que algún día me haga caso, etc...



Estas reflexiones continuarán y se enriquecerán con tus comentarios !suscribete es gratis¡http://relaciones-por-internet.blogspot.com/

Suscribete a mujeres que aman demasiado por Email

lunes, 10 de agosto de 2009



Cuando estar enamorada significa sufrir, estamos amando demasiado. Cuando la mayoría de nuestras conversaciones con amigas íntimas son acerca de él, de sus problemas, sus ideas, sus sentimientos, y cuando casi todas nuestras frases comienzan con "él...", estamos amando demasiado.
Cuando disculpamos su mal humor, su mal carácter, su indiferencia o sus desaires como problemas debidos a una niñez infeliz y tratamos de convertirnos en su terapeuta, estamos amando demasiado.
Cuando leemos un libro de autoayuda y subrayamos todos los pasajes que lo ayudarían a él, estamos amando demasiado. Cuando no nos gustan muchas de sus conductas, valores y características básicas, pero las soportamos con la idea de que, si tan sólo fuéramos lo suficientemente atractivas y cariñosas, él querría cambiar por nosotras, estamos amando demasiado.
Cuando nuestra relación perjudica nuestro bienestar emocional e incluso, quizá, nuestra salud e integridad físicas, sin duda estamos amando demasiado. A pesar de todo el dolor y la insatisfacción que acarrea, amar demasiado es una experiencia tan común para muchas mujeres que casi creemos que es así como deben ser las relaciones de pareja.
La mayoría de nosotras hemos amado demasiado por lo menos una vez, y para muchas de nosotras ha sido un tema recurrente en nuestra vida. Algunas nos hemos obsesionado tanto con nuestra pareja y nuestra relación que apenas podemos funcionar como personas.
En este lugar nos apoyaremos y ayudaremos a salir adelante en este tipo de relaciones... si te sientes identificada no lo dudes, ¡sumate! ¡es gratis! ¡te estamos esperando!

http://relaciones-por-internet.blogspot.com/

Suscribete a mujeres que aman demasiado por Email